¿REALMENTE CREÍA ARIO QUE CRISTO FUE CREADO?

Existe una creencia popular entre las iglesias trinitarias del mundo hoy en día, que afirma que Arrio, un obispo del siglo III-IV, que se oponía a la enseñanza de la Trinidad, creía que Cristo era un ser creado. Y aquellos de nosotros que nos oponemos a la enseñanza de la Trinidad hoy en día somos comúnmente etiquetados como "arrianos". Y también se nos acusa de creer que Cristo fue un ser creado. ¿Pero realmente creía Arrio que Cristo fue creado? Gran parte de los escritos de Arrio fueron destruidos por orden de Constantino y obispos del siglo IV, pero afortunadamente, todavía tenemos escritos históricos de historiadores antiguos que nos ayudan con esto.

Los primeros historiadores muestran, como se muestra abajo, que Arrio NO creía que Cristo fue creado.

Philippus Van Limborch, un teólogo holandés del siglo XVII, escribió "The History of the Inquisition". Y basándose en los escritos históricos de historiadores del siglo V, como Sócrates, Sozomen y Teodoreto, Limborch muestra que Arrio NO creía que Cristo fuera un ser creado, sino más bien el HIJO ENGENERADO de Dios el Padre. Limborch cita lo siguiente en su libro "The History of the Inquisition":

"La causa de la controversia arriana fue esta. Alejandro, obispo de Alejandría, hablando con mucho fervor sobre la Trinidad ante los presbíteros y el clero de su iglesia, afirmaba que había una unidad en la Trinidad y particularmente que el Hijo era coeterno y consustancial, y de la misma dignidad que el Padre. Arrio, uno de sus presbíteros, pensó que el obispo, con esta doctrina, estaba introduciendo la herejía sabeliana, y por lo tanto se opuso a él, argumentando de esta manera: "a - Si el Padre ENGENDRÓ al Hijo, EL QUE FUE ENGENDRADO DEBE TENER UN PRINCIPIO DE SU EXISTENCIA; y por lo tanto, dice él, es evidente que hubo un tiempo en que él no existía." (Limborch, The History of the Inquisition, p.22)

"Arrio afirmó: 'El Hijo tiene un principio, y no es de ninguna de las cosas que existen', sin querer decir que no era de la eternidad, antes de que la creación tuviera existencia, O QUE FUE CREADO COMO OTROS SERES ABSOLUTAMENTE DE LA NADA, o que como el resto de la creación fuera mutable en su naturaleza. ARRIO DECLARA EXPRESAMENTE LO CONTRARIO en su carta a Eusebio, su íntimo amigo, a quien no tenía razón para ocultar sus más secretos sentimientos, y dice... "Esto es lo que tenemos y profesamos, QUE EL HIJO NO ES NO-ENGENDRADO ni en modo alguno parte del Dios no-engendrado, ni de ninguna parte del mundo material, sino que por la voluntad y consejo del Padre existió antes de todos los tiempos y edades, Dios perfecto, EL ÚNICO ENGENDRADO e inmutable, y por tanto antes de ser engendrado o formado no existía", como él mismo explica, "Nunca hubo un tiempo en que fuera no-engendrado". Afirmar por tanto que el Hijo tuvo un principio, sólo decía que él estaba en toda su existencia desde el Padre, como el origen y fuente de su ser y deidad, y no una negación de que existiera antes de todos los tiempos y edades, y su decir que no era parte de Dios, ni derivado de las cosas que existen, NO NEGABA SU GENERACIÓN DE DIOS ANTES DE TODAS LAS EDADES, ni que él mismo fuera completamente Dios, ni que fuera producido de una manera más excelente que las criaturas, sino que, como siempre fue de Dios, así era diferente tanto de él como de todos los demás seres." (Limborch, The History of the Inquisition, p.24)

NOTA IMPORTANTE: Cuando Arrio decía cosas como que Cristo "no es en modo alguno parte del Dios no-engendrado", lo que simplemente quiso decir es que Cristo era un ser completamente separado de Dios el Padre. Y esto fue parte de la tergiversación que hicieron otros obispos respecto a los escritos de Arrio. Tomaron algunas palabras que Arrio dijo y escribió y las interpretaron erróneamente con otro significado.

"Y sin embargo, a pesar de todas estas cosas, cuando Alejandro da cuenta de los principios de Arrio a los obispos, los representa en todas las consecuencias que él consideraba adecuadas, Y LO ACUSA [a Arrio] DE SOSTENER QUE EL HIJO FUE HECHO COMO CUALQUIER OTRA CRIATURA ABSOLUTAMENTE DE LA NADA, y por lo tanto su naturaleza era mutable y susceptible igualmente de virtud y vicio; con muchas otras doctrinas insidiosas y no escriturales, QUE ARRIO CLARAMENTE NO PARECE HABER MANTENIDO NI ENSEÑADO." (Limborch, The History of the Inquisition, p.25)

"Arrio... en su carta a Eusebio de Nicomedia... acusa al Papa Alejandro de perseguirlo violentamente y oprimirlo a causa de lo que él llamaba la verdad, y usar todos los métodos para arruinarlo, expulsándolo de la ciudad como un ateo, POR NO ESTAR DE ACUERDO CON ÉL EN SUS SENTIMIENTOS SOBRE LA TRINIDAD." (Limborch, The History of the Inquisition, p.31)

"La controversia aria, que causó tanto daño en la iglesia cristiana, fue, si puedo decirlo sin ofender, al principio sólo acerca de palabras... Arrio, como se ha mostrado, permitió expresamente que el Hijo sea "antes de todos los tiempos y edades... Dios perfecto, inmutable", y ENGENDRADO A LA MÁS PERFECTA SEMEJANZA DEL PADRE NO-ENGENDRADO." (Limborch, The History of the Inquisition, p.95)

Sozomeno, un historiador del siglo V, (a quien Limborch cita en sus escritos anteriores) cita a Arrio confirmando lo siguiente:

"No pasó mucho tiempo antes de que [Constantino] llamara a Arrio del exilio y le exigiera una exposición escrita de su fe SOBRE LA DIVINIDAD... él [Arrio] declaró bajo juramento que sostenía las doctrinas presentadas en esta exposición... Era la siguiente: "Arrio y Euzoio, presbíteros, a Constantino, nuestro emperador más piadoso y más amado de Dios. Según su piedad, amado de Dios, ordenó, oh soberano emperador, aquí presentamos una declaración escrita de nuestra propia fe, y protestamos ante Dios que nosotros, y todos los que están con nosotros, creemos en lo que aquí se expone. "CREEMOS EN UN SOLO DIOS, EL PADRE TODOPODEROSO, Y EN SU HIJO el Señor Jesucristo, QUE FUE ENGENDRADO POR ÉL ANTES DE TODOS LOS TIEMPOS, Dios la Palabra, por quien fueron hechas todas las cosas, sean cosas del cielo o de la tierra; Él vino y tomó carne, sufrió y resucitó, y ascendió al cielo, de donde volverá para juzgar a los vivos y a los muertos. Creemos en el Espíritu Santo, en la resurrección del cuerpo, en la vida venidera, en el reino de los cielos." (Salminius Hermias Sozomeno - Historia eclesiástica de Sozomeno: que comprende una historia de la iglesia desde el año 324 hasta el 440 D.C., p.94)

Por lo tanto, como puedes ver claramente de los historiadores anteriores, Arrio NO creía que Cristo fuera un ser creado. Arrio creía plenamente en la naturaleza 'engendrada' de Jesucristo, como un verdadero HIJO, engendrado por Dios Padre en algún momento de la eternidad pasada, tal como enseña la Biblia. Pero porque Arrio rechazó la doctrina de la Trinidad, que fue establecida por personajes como Atanasio y reforzada por Constantino, las creencias de Arrio fueron 'torcidas' para hacer parecer que creía que Cristo era un ser 'inferior' creado. Esta es la misma acusación falsa que se hace a aquellos de nosotros que seguimos al único Dios verdadero y a Su Hijo conforme a la verdad de la Biblia.

Parece que el punto principal de disputa fue la creencia de Arrio de que el Hijo de Dios en algún momento TUVO UN PRINCIPIO, lo cual es claramente lo que la Biblia enseña y es completamente lógico, si Cristo es el verdadero HIJO ENGENDRADO de Dios Padre. Pero esto iba totalmente en contra de la doctrina del dios trino que los obispos estaban promoviendo, la cual surgió del concilio de Nicea en 325. Por lo tanto, los obispos mandaron quemar los escritos de Arrio y tergiversaron sus creencias, haciendo parecer que Arrio creía que Cristo era un ser creado. Como vemos en la cita a continuación, Constantino ordenó desterrar a Arrio y sus escritos, y el estándar de la fe cristiana ya no fue la Biblia, sino la Iglesia Romana, por los siglos venideros:

"Y con respecto a los arrianos, él [Constantino] desterró al mismo Arrio, ordenó que todos sus seguidores, como enemigos absolutos de Cristo, ... ordenó que los libros escritos por ellos fueran quemados, para que no quedara ningún resto de su doctrina para la posteridad, y ordenó cruelmente que si alguien osaba conservar en su posesión algún libro escrito por Arrio y no lo quemaba inmediatamente, sería condenado por ese crimen y sufriría la muerte. Así, los ortodoxos fueron los primeros en imponer el castigo de herejía con la muerte, y persuadieron al emperador para destruir a aquellos que no podían convertir fácilmente. Las Escrituras ya no eran la regla y estándar de la fe cristiana." (Limborch, The History of the Inquisition, p.30)

En su libro "La Verdad Triunfante", B.G. Wilkinson confirmó que la 'acusación errónea' de arrianismo se atribuye a todos los que no suscriben la enseñanza de la Trinidad... "Entonces el partido papal procedió a llamar arianos a aquellos que no aceptaban esta enseñanza [la Trinidad], mientras ellos se apropiaban el título de trinitarios. SE CIRCULÓ UNA ACUSACIÓN ERRÓNEA DE QUE TODOS LOS LLAMADOS ARIANOS CREÍAN QUE CRISTO ERA UN SER CREADO." (B.G. Wilkinson, Truth Triumphant)

Y así la controversia sigue hasta hoy! Y la falsa acusación contra nosotros, los no trinitarios, ¡continúa! El mundo nos etiqueta como 'arianos', y sin embargo están cegados a la verdad acerca de Arrio, gracias a esa religión 'anticristo', la Iglesia Católica Romana, que sigue promoviendo la FALSA ACUSACIÓN contra Arrio y los no trinitarios. Así que el 'vino de Babilonia' continúa siendo bebido por el mundo, y aquellos de nosotros que defendemos la verdad somos perseguidos, tal como Arrio fue perseguido y como los '3 cuernos' de la cuarta bestia en Daniel 7 fueron destruidos, porque, ¿adivina qué? ¡eran tribus ARRIANAS!

Si quieres profundizar sobre la falsa trinidad, y el Padre y el Hijo, por favor echa un vistazo a nuestras siguientes páginas:

LA TRINIDAD EXPUESTA           ¿QUIÉN ES EL ESPÍRITU SANTO?

LLAMADO URGENTE A LOS CRISTIANOS           ¿CUÁNTOS SERES HAY EN LA DIVINIDAD?

¿ES JESÚS EL HIJO LITERAL DE DIOS?           ¿ES JESUCRISTO DIOS?